RETINOPATÍA DIABÉTICA, UNA COMPLICACIÓN QUE SE PUEDE PREVENIR.

 por Dr. German González.

La RD es responsable del 5% de la ceguera a nivel mundial y es una afección que va en claro aumento pese a las múltiples campañas de prevención. La patología se encuentra adscrita al programa GES.

El año 2000 había 171 millones de personas con Diabetes Mellitus en el mundo. Se espera que el 2030 esa cifra alcance los 366 millones de pacientes. Los factores más importantes que inciden en la aparición de la RD son la duración de la Diabetes y la severidad de la hiperglicemia. Un diabético con 20 años de declarada la enfermedad tiene un riesgo de 90% de tener algún grado de Retinopatía si es tipo I ( o Juvenil ) y de un 60% si es de tipo II ( o del adulto ) . Está demostrado que un control estricto de la glicemia detiene la progresión de la Retinopatía o incluso la puede hacer disminuir.

La Retinopatía Diabética (RD) es una complicación ocular de la diabetes provocada por el deterioro de los vasos sanguíneos que irrigan la retina. “El daño de los vasos sanguíneos de esta área del ojo puede provocar una fuga de fluido o sangre causando edema retinal o hemorragias retinales, lo que causa problemas visuales ( retinopatía no proliferante ). O puede que los vasos se obstruyan provocando falta de oxígeno en el tejido retinal con la consiguiente formación de neovasos, los cuales a su vez , por ser de paredes muy frágiles pueden sangrar a la cavidad vítrea o proliferar junto a tejido fibroso causando desprendimiento retinal y ceguera en las etapas más avanzadas de la enfermedad ( retinopatia proliferante )”, explica el Dr. Germán González, cirujano oftalmólogo de Clínica Pasteur.

El oftalmólogo diagnostica la RD mediante un examen de fondo de ojo con pupila dilatada, evaluación que debe efectuarse al menos una vez al año en todo paciente diabético sea cual sea la data de su enfermedad .

El tratamiento con láser de argón es el más escogido para tratar las formas no proliferantes de la RD que cursan con edema macular (edema en la parte central de la retina). Mientras que la Panfotocoagulación es el tratamiento de primera línea para la forma proliferante de la enfermedad.

“Actualmente además del láser, se cuenta con las inyecciones intravítreas de fármacos como el avastin , que son bastante efectivas para disminuir en forma importante el edema en esta área. Desgraciadamente, esta mejoría es transitoria y muchas veces el procedimiento debe repetirse a fin de mantener al paciente con buena visión”, explica el Dr. González.. Y agrega que “para la retinopatía proliferante avanzada en que el tratamiento de Panfotocoagulación no logra detener la afección, la operación de Vitrectomía efectuada en forma oportuna es bastante efectiva en devolverle la visión al paciente” .