PRESBICIA, UNO DE LOS MAYORES DESAFÍOS EN OFTALMOLOGÍA.

 por Dr. Rodrigo Donoso.

Esta condición propia del ser humano comienza a manifestarse alrededor de los 40 años.

Cuando usted note que debe alejar su reloj para ver la hora o estirar más los brazos para sostener lo que quiere leer, son los primeros indicios de la presbicia. Condición del ser humano que comienza a manifestarse como dificultad para ver de cerca, después de los 40 años. Ello como consecuencia de la pérdida de acomodación, proceso por el cual el ojo aumenta su poder óptico para mantener una imagen clara (enfocada) en un objeto en la medida que se acerca al ojo.

Hay que asistir a un chequeo anual alrededor de los 40 años para descartar que la mala visión sea por otras causas como enfermedades o defectos ópticos latentes agregados, que adelantan la presbicia, como hipermetropía o astigmatismo. “A nivel mundial aún no existe una cirugía específica para la presbicia, aprobada ni probada, que la pueda corregir. Pero sí hay algunas alternativas quirúrgicas para cuando se acompaña de hipermetropía (dificultad o molestia para ver de lejos) como la extracción del cristalino con implantación de lentes intraoculares “multifocales” (que no tienen nada que ver con el sistema de los anteojos multifocales) o técnicas que pueden mejorar bastante la visión cercana, como la cirugía LASIK “monocular” corrigiendo un ojo para ver bien de cerca y el otro para ver bien de lejos”, explica el doctor Rodrigo Donoso, cirujano especialista en cirugía refractiva de Clínica Oftalmológica Pasteur “En primer lugar, y lejos lo más importante, es la adecuada selección del paciente: que esté motivado a no usar anteojos de cerca, entendiendo las ventajas, riesgos y limitaciones de las técnicas quirúrgicas, y luego aterrizarlo en su nivel de expectativas. Hay que explicarle que la única ventaja de estos lentes multifocales es que le darán una gran independencia de anteojos, pero que le permitirán ver de cerca sin anteojos la mayoría del tiempo y no en un 100% de sus actividades de cerca”, agrega el Doctor Donoso.

“En segundo lugar viene la adecuada selección del ojo. Un ojo candidato para estas técnicas quirúrgicas, ya sea de Lasik o lente intraocular multifocal o acomodativo debe ser normal, sin cirugía previa, especialmente si es refractiva, sin patología ni altos astigmatismos (>1.5 D), aunque éstos se pueden disminuir con incisiones antiastigmáticas durante el intercambio de cristalino o mediante una cirugía refractiva secundaria con LASIK”, detalla el Doctor Rodrigo Donoso.

Por último adquiere especial importancia el cálculo correcto del poder de estos lentes intraoculares