LASIK, CONSAGRADA SOLUCIÓN PARA DECIR ADIÓS A LOS LENTES.

 por Dr. Claudio Yaluff.

El uso de lentes ópticos o de contacto tiene múltiples desventajas, quienes están obligados a usarlos lo saben bien. Dependencia para levantarse, leer, caminar, hacer deportes, maquillarse, sin contar, además, que los lentes se extravían, se rayan, se empañan y que alteran la apariencia física poniendo una barrera ante los ojos, que son una de las principales fuentes de comunicación con los demás.

La Cirugía Refractiva Lasik, es una técnica quirúrgica que reduce o elimina la miopía, el astigmatismo y la hipermetropía. Es mínimamente invasiva, indolora y ambulatoria. Cambia la forma de la cornea mediante la acción de un rayo láser permitiendo una mejor refracción de los rayos luminosos sobre la retina.

El lasik ha revolucionado la oftalmología. Ya cumplió 18 años y se ha consagrado como una solución segura, efectiva que cambia para siempre la vida de quienes se someten a ella.

“Los mejores pacientes son aquellos realmente motivados por operarse, pacientes sanos que quieran dejar de usar lentes y que califiquen con las tres patologías que son factibles de revertir con esta cirugía”, dice el Dr. Claudio Yaluff, cirujano oftalmólogo de Clínica Pasteur.

Ser mayor de 21 años y que la enfermedad no haya avanzado durante los últimos dos, son los principales requisitos para someterse a la Cirugía Refractiva Lasik. Por tratarse de una técnica basada en la precisión y exactitud en la aplicación del láser, antes de la cirugía hay que ser evaluado por un oftalmólogo y efectuarse algunos exámenes para medir la forma y grosor de la córnea entre otros

“El grado de seguridad de esta técnica es muy alto, es difícil pensar en otra cirugía que tenga márgenes tan altos de confiabilidad como el lasik. Las complicaciones son muy escasas porque ante la más mínima contraindicación simplemente se aborta la cirugía, no se hace. Por eso se dice que el grado de seguridad al hacerla en buenas manos es del 99%”, acota el Dr. Yaluff.

La cirugía refractiva Lasik soluciona el problema al 90% de los pacientes que consulta. Pero hay un pequeño grupo de personas que padece miopía o hipermetropía en grados tan extremos, que no les sirve el Lasik y requieren una técnica diferente con implantación de lente intraocular.

Tampoco es recomendable para pacientes embarazadas ni en período de lactancia. Ni en aquellos cuyas córneas son demasiado delgadas o sufren de cataratas.