ESTRABISMO ADULTO, NUNCA ES TARDE PARA MEJORAR.

 por Dr. Iván Villaseca.

El estrabismo es una de las enfermedades oftalmológicas más comunes en la infancia. Se refiere a la pérdida de paralelismo en los ejes visuales. Aunque tiene tratamiento con el uso de parches correctores y existe una exitosa cirugía que conviene practicar en la infancia, hay muchos adultos que aún experimentan profundos complejos porque no recibieron tratamiento oportuno.

El estrabismo impide que se logre la visión binocular, es decir, no deja que veamos en tres dimensiones. Incluso si no se recibe tratamiento oportuno, lo más probable es que se perderá la visión de uno de los ojos.

Hasta los 4 ó 5 meses de edad es normal sufrir un leve estrabismo. Pero cuando aparece en niños mayores, con frecuencia es provocado por una hipermetropía, la que obliga al menor a hacer un esfuerzo de enfoque para ver nítido. Esto provoca un estrabismo convergente (ojos desviados hacia la nariz) que, inicialmente, puede ser ocasional pero que luego se hace permanente. Este tipo de estrabismo recibe el nombre de “acomodativo” y tiene excelente pronóstico si se trata rápidamente con el lente corrector.

“Los estrabismos aparecidos en adultos tienen varias causas posibles desde traumatismos encéfalo craneanos hasta problemas de autoinmunidad relacionados con la glándula tiroides, pasando por lesiones tumorales intracraneales, lesiones vasculares relacionadas con diabetes o con hipertensión arterial, lesiones de un ojo que obstaculicen la visión como cataratas o desprendimientos de retina”, explica el doctor Iván Villaseca, oftalmólogo de Clínica Pasteur.

La gran mayoría de los estrabismos del adulto puede corregirse. Éste se trata, inicialmente, con oclusión de un ojo para evitar la diplopía (visión doble), por a lo menos, 6 meses, con el objeto de evaluar la evolución del caso. Con frecuencia estos estrabismos se resuelven solos en este período. Si no hay mejoría se considera como segundo paso la intervención quirúrgica. Cabe destacar que los estrabismos en el adulto que están presentes desde la infancia no requieren tratamiento previo a la operación.

“Con respecto a la cirugía, hay que tener presente que se está actuando sobre músculos “vivos” que tienen una respuesta peculiar para cada persona; por lo que el resultado quirúrgico no puede garantizarse totalmente y suele ser necesaria más de una intervención. Sin embargo, las nuevas técnicas de cirugía ajustable permiten un porcentaje de éxito bastante mejor que con la cirugía tradicional”, señala el doctor Villaseca.